Alejandro Ylla

Robots inteligentes, humanos que se adaptan… o se quedan atrás

La Physical AI no es ciencia ficción: está transformando la manufactura hoy. Robots que aprenden, toman decisiones y se adaptan a tareas diversas ya operan en Amazon, Foxconn y otras empresas líderes, mejorando eficiencia, reduciendo errores y creando nuevos roles especializados.

· Amazon ya tiene más de un millón de robots en sus centros logísticos. Colaboran con empleados en tareas como mover, clasificar y empaquetar productos. El resultado: un 25% más de eficiencia, entregas más rápidas y hasta un 30% más de empleos cualificados en los centros que han desplegado esta tecnología.

· Foxconn, gigante de la electrónica, está utilizando gemelos digitales y robots con IA para tareas complejas como el montaje de cables o el apriete de tornillos, donde antes los robots fallaban. Han logrado acortar un 40% los tiempos de despliegue, mejorar los ciclos de producción un 20-30% y reducir los errores un 25%.

Pero un punto crítico que pocos destacan:

– Los robots no reemplazan a los humanos… reemplazan a quienes no evolucionan.

Automatizar procesos libera tiempo y permite enfocarse en trabajos de mayor valor, pero solo si existe formación, aprendizaje continuo y disposición al cambio. Los que se resistan, inevitablemente, quedarán fuera.
Ahora bien, este no deja de ser un gran reto humano y social: no todas las personas tienen la misma capacidad, recursos o entorno para evolucionar al ritmo que exige la tecnología. El verdadero desafío será cómo acompañar a esos profesionales para que la transición sea inclusiva y sostenible, evitando que una parte de la fuerza laboral quede marginada.

En un mundo con escasez de talento, costos crecientes y clientes cada vez más exigentes, la clave no es solo adoptar tecnología, sino construir una cultura que combine inteligencia humana y artificial.

Reflexión: La verdadera ventaja competitiva no está en la máquina, sino en cómo las personas y las organizaciones aprenden y evolucionan con ella. La pregunta no es si los robots nos reemplazarán, sino si estamos listos para evolucionar… y cómo ayudaremos a quienes no lo estén.